Aquí el testimonio de un compañero que antes estaba en la cárcel de Ponent, y que fué trasladado a Puig de les Basses, en Figueres. Nos pide que difundamos estos hechos, ocurridos el ultimo dia del año del 2018.
El dia 31.12.2018 vi un barullo en la escalera del modulo 5. Me acerqué y contemplé como el funcionario tenia agarrado del cuello y contra el suelo a un preso de 72 años y enfermo. Todos los internos increpamos al funcionario por su actuación. Yo lo unico que le dije fué: «Que sea la ultima vez que trata así a una persona mayor».
Pero este llamó al jefe de servicios, mintiendo. Dijo que yo lo había agarrado, siendo mentira. Este jefe de serivicio, no averiguó los hechos mirando las cámaras o preguntando a los demás presos. Después de comer y una vez encerrados todos en las celdas, subieron 5 o 6 funcionarios a mi celda, donde no hay cámaras. Me tiraron al suelo. Me golpearon y agredieron, causandome lesiones en los dos codos, en el cuello y la oreja derecha. Me pusieron las esposas, me sacaron de la celda y me llebaron al departamento especial.
Una vez en esa sala se me mete en el cuarto de cacheos y soy reducido de nuevo. No veo bien a los funcionarios que me hacen eso. Me doblan el tobillo y la muñeca. Al mirar el numero de identificacion de uno de ellos, se lo ha arrancado rápido y se lo ha escondido.
Difundo este resumen por las redes sociales, además de otro al juzgado de guárdia, donde pido que se revisen las cámaras de seguridad y se tenga en cuenta la declaración de varios testigos que vieron como yo no toqué al funcionario.